Si hay algo que aun me hace ilusión en la vida es mi cumpleaños. Sorpresas, un motivo para celebrar, para hacer algo especial con la gente para la que verdaderamente me aprecia. También es el día de las decepciones ya que descubres que a cierta gente la cual colmas de atenciones y regalos por sus cumpleaños no te devuelven lo mismo ni les interésas. Sin embargo la gente apartir de una edad dicen ''¿Para qué celebrar esto y es un año menos de vida?'' Pues eso es lo que me parece más fascinante, hacer un examen de conciencia y pensar en lo productivo que ha sido este último año. Si me he enriquecido interiormente, cosa que suele pasar siempre, me ánima a seguir cumpliendo años porque sé que aunque cada vez tenga menos tiempo de vida, el tiempo ya gastado no ha sido en vano y ha servido para algo.
Una de las cosas que me esta pasando al cumplir años es el deseo de una vida real y por ello vivo tan desapegada al Blog y a las nuevas tecnologías. Hace años me dejaba llevar por la rutina, juegos de ordenador, clases, salir viernes y sábados,... pero ya no, poco a poco me fui despegando y aunque haya gente que me diga que hay un término medio para todo, no se esta tan mal si me despego y vivo algo real ya que en ese ámbito los recuerdos son menos efimeros y más claros.
Aun así volveré siempre a mi rinconcito secreto, lo sabéis.
A mandar!